UN EFECTO COLATERAL

Miembro Nogni: Maria

Sabemos que el tema principal de nuestro blog son los viajes, pero tenemos la necesidad de escribir

este post ya que es un efecto colateral de viajar.

Este post va dedicado al mundo Erasmus, a todas las amistades que haces cuando te vas pero

también a las amistades que haces porque vienen personas a tu país de origen.

Concretamente este post va dedicado a las amistades que nacen de la nada, a la suerte de conocer a

una persona que aparece en tu vida sin quererlo y a esa misma persona que se acaba marchando y

que despides con mucha tristeza. 

Benditos alumnos de intercambio, los más fiesteros del lugar, aquellos que están dispuestos para

literalmente todos los planes que se presenten. Que no te engañe su timidez del principio, no son

para nada lo que aparentan.  Puedes llegar a aprender mucho sobre ellos, sus países de origen, sus

religiones y sus costumbres. 

Si eres alumno de universidad, (no importa el grado en el que estés ni el año que curses) y ves a un

alumno de intercambio lo mejor que puedes hacer es presentarte. Un simple "Hola", puede

desencadenar una serie de experiencias increíbles y amigos que con suerte aunque viváis en distintos

continentes conservarás para siempre.  

Estos últimos meses he podido conocer a Viviana, o como la llamo yo "mi chucha" (una palabra

peruana que no tengo ni idea de lo que significa pero desde que me la enseñó no me la quito de la

cabeza). Vivi es una chica de intercambio que vino desde Perú para estudiar el grado de

comunicación en un país totalmente distinto al suyo, España. Realmente tiene que ser duro para una

persona cruzar el mundo, y acabar en un lugar donde las costumbres, la manera de actuar y de

funcionar es totalmente distinta a lo visto anteriormente. Al principio la adaptación es dura, nuevos

amigos, nueva universidad, nueva comida, no sabes ni como va el transporte público, ni los lugares a

los que debes ir para salir de fiesta (aunque en este caso la adaptación es bastante rápida, muchas

veces acaban siendo ellos los que te acaban mostrando nuevos sitios de tu propia ciudad de los que

nunca habías oído hablar) ni las personas con las que te tienes que juntar para hacer trabajos (porque

eres nuevo y no conoces a nadie y parece que los grupos ya están formados). Estas y muchas cosas

más son las que tuvo que hacer frente mi amiga Vivi, por no contar cuando echas en falta a tus

familiares, o cosas tan simples como tu cama de tu casa, o el fondo de armario que no te has podido

traer por falta de espacio en el equipaje. 

Ahora en apenas 3 días regresará a su país de origen y llega la etapa en la que quieres volver pero te

da pena marchar. Las despedidas son duras si los momentos vividos han sido buenos, pero estoy

segura de que nos volveremos a encontrar aunque ahora será mi turno visitar Perú.


Muchos besos,